La consellera de Salud, Manuela García, ha expresado su desacuerdo con la transferencia de la gestión de la formación en medicina interna residente (MIR) a las comunidades autónomas y ha solicitado al Gobierno central que defienda la equidad y cohesión nacional en este sentido.
García manifestó su postura después de la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, que tuvo lugar este lunes por videoconferencia. Durante la reunión, la consellera defendió la equidad y cohesión nacional en la formación sanitaria especializada y lamentó que el sistema de formación esté siendo objeto de negociación política, según informó la Conselleria en un comunicado.
En concordancia con los colectivos profesionales médicos que se oponen a la transferencia, la consellera destacó que romper el modelo actual resultaría en la pérdida de la calidad y homogeneidad que existe actualmente.
También recordó que el sistema actual es reconocido a nivel mundial y ha estado funcionando con éxito durante 40 años, proporcionando una formación basada en el mérito en todo el Sistema Nacional de Salud.
"Trasladar esta responsabilidad a las autonomías significaría acabar con un modelo que ya ha demostrado su éxito y tendría consecuencias para todo el sistema sanitario, incluyendo a los pacientes", señaló la consellera de Salud.
El Colegio Oficial de Médicos de Baleares (Comib) y el Sindicato Médico Balear (Simebal) también respaldaron conjuntamente la equidad y cohesión nacional en el sistema MIR actual.
En un comunicado, ambas entidades expresaron su apoyo a la postura del Foro de la Profesión Médica, que mostró su "profunda preocupación y rechazo ante una medida que genera desigualdades en la formación, provoca falta de cohesión en los estándares de calidad a nivel nacional y dificulta la movilidad y homologación de profesionales".
"El Sistema Nacional de Salud es fundamental para el estado de bienestar y la justicia social en nuestro país, y cualquier cambio en él requiere la participación de todos los actores involucrados y un amplio acuerdo nacional que permita encontrar soluciones que preserven la calidad y equidad en la formación de médicos en España", agregaron.
Asimismo, recordaron que la competencia para la homologación de títulos de grado médico y de especialista y el reconocimiento a efectos profesionales de los mismos son otorgados por el Estado central y con la participación de los Consejos Generales de las profesiones.
Por lo tanto, "lo contrario va en contra de los principios de equidad y no discriminación, además de ser posiblemente una falta de competencia autonómica e incumplimiento por parte del Ejecutivo del reconocimiento expreso a los Consejos generales de las profesiones tituladas, colegiadas y reguladas de la Autoridad competente compartida que les asiste, tal y como se dicta en los RD legales y vigentes al efecto", concluyeron.