Baleares registra 40 casos de lengua azul del serotipo 8.

En un comunicado reciente, la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural ha proporcionado una actualización sobre la situación de la lengua azul en Baleares, revelando que hasta el momento se han confirmado 40 focos del serotipo 8 en la región. De estos, 36 se encuentran en Mallorca y cuatro en Menorca, todos afectando al ganado ovino. Sin embargo, aún se espera conocer los resultados de las muestras recolectadas en otras fincas.

En Mallorca, las explotaciones afectadas se ubican en varios municipios, incluyendo Sóller, Deià, Pollença, Esporles, Campanet, Escorca, Bunyola, Estellencs, Fornalutx, Andratx, Alaró y Valldemossa. Además, existen posibles casos en Binissalem, Inca, Lloseta, Calvià, Palma, Puigpunyent y Santa Margalida. En Menorca, por otro lado, no se han detectado nuevos focos, manteniéndose los cuatro declarados previamente en Ferreries, Ciutadella de Menorca y Es Migjorn Gran.

Una reunión reciente entre los responsables de sanidad animal de las comunidades autónomas y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha resultado en un consenso sobre medidas para flexibilizar el movimiento de animales entre zonas afectadas y zonas libres de los serotipos 1 y 8 de lengua azul.

El director general de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Fernando Fernández, ha expresado su apoyo a estas medidas, destacando la importancia de seguir protocolos para garantizar la salud de los animales y evitar la propagación de enfermedades.

El protocolo establece requisitos específicos para los movimientos de animales, incluyendo desinsectación, tratamiento con repelente, y presentación de PCR negativa, entre otros. Se ha hecho hincapié en la importancia de seguir estas normas para mantener la actividad ganadera sin poner en riesgo la salud de los animales.

En relación con las vacunas, se está trabajando en conjunto con el Ministerio para adquirir las necesarias y comenzar una campaña de vacunación. Se recuerda que la lengua azul no representa un riesgo para la salud pública, ya que es una enfermedad que afecta únicamente a los rumiantes.