El Ministerio de Hacienda y Función Pública ha publicado datos correspondientes a la ejecución presupuestaria de las Administraciones Públicas en lo que va de año. Según los datos facilitados, en los dos primeros meses del año, Baleares ha registrado un déficit de 131 millones de euros, un 0,38% de su PIB, lo que significa un aumento del déficit en comparación con el mismo periodo del año anterior, que ascendía a 94 millones, el 0,28% del PIB.
Por otro lado, los datos evidencian que el Estado registrado un déficit en el primer trimestre del año de 510 millones, lo que representa un descenso del 91,4% respecto a los 5.900 millones del mismo periodo del ejercicio anterior, equivalente al 0,04% del PIB, frente al 0,44% existente en marzo de 2022.
Los datos publicados muestran que el déficit del Estado continúa la senda descendente iniciada en 2021 y que se ha mantenido en 2022 como consecuencia de la reactivación económica y la creación de empleo. En concreto, el déficit del Estado en los tres primeros meses del año 2023 se ha reducido un 91,4%. Esta mejora se debe a un incremento de los ingresos no financieros del 9,7%, frente al comportamiento de los gastos, que decrecen levemente a un ritmo del 0,2%.
El Ministerio de Hacienda y Función Pública también ha publicado los datos de déficit consolidado de la Administración Central, comunidades autónomas y Seguridad Social, pero en este caso hasta el mes de febrero.
El déficit conjunto de la Administración Central, los Fondos de la Seguridad Social y las comunidades autónomas, excluida la ayuda financiera, se situó en 8.544 millones en febrero de 2023, un 31,2% por debajo de las cifras del año pasado, equivalente al 0,62% del PIB, frente al 0,94% del mismo periodo de 2022. Si se incluye el saldo de la ayuda a las instituciones financieras, el déficit se mantiene en el 0,62% del PIB.
Por su parte, el déficit de la Administración regional registró en febrero un leve aumento, alcanzando los 183 millones, el 0,01% del PIB, frente al déficit del 0,09% registrado en el mismo periodo del año anterior.
En cuanto a los ingresos, los impuestos han crecido un 8,5% (1.020 millones más) y destacan los impuestos sobre la producción y las importaciones, que alcanzan la cifra de 2.833 millones. En particular, los ingresos por impuestos sobre la renta y patrimonio, así como los ingresos por impuestos sobre el capital, han experimentado un aumento significativo.
En cuanto a los gastos, las transferencias entre administraciones públicas son la partida de mayor volumen. La remuneración de asalariados, que se sitúa en 4.668 millones, está afectada por la subida del 2,5% en las retribuciones del empleo público.