Crónica Baleares.

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Confiesa del asesinato en Sineu acepta 17 años de cárcel tras llegar a un acuerdo.

Confiesa del asesinato en Sineu acepta 17 años de cárcel tras llegar a un acuerdo.

La autora del trágico crimen que conmocionó Mallorca, conocido como el caso de la maleta de Sineu, ha decidido llegar a un acuerdo con la Fiscalía. La mujer, que ha confesado su culpabilidad en este horrendo acto, aceptará la pena de 17 años de cárcel presentada por el Ministerio Público.

Documentos a los que ha tenido acceso la prensa indican que la acusada está de acuerdo con las circunstancias jurídicas y los cargos que se le imputan. Además, ha optado por no presentar ninguna defensa alternativa y se ha comprometido a ratificar esta conformidad durante el juicio con jurado que se programará en fechas próximas.

En abril de 2023, el Juzgado de Instrucción número 1 de Inca decidió iniciar el procedimiento judicial que llevará el caso ante un Tribunal del Jurado, que se espera que se convoque en poco tiempo.

Desde la Fiscalía se argumenta que los hechos constituyen un delito de homicidio agravado. En sus acusaciones, el Ministerio Público señala que el día 14 de abril de 2024, la mujer atacó a su tía de 91 años, a quien cuidaba y que, además, era completamente dependiente.

A lo largo del ataque, la mujer infligió múltiples heridas a su tía y, una vez que esta cayó al suelo, le asestó un cuchillazo en el tórax, provocándole la muerte. Para evadir la responsabilidad de su crimen, se alega que ideó un relato para encubrir la realidad de los hechos, intentando presentar la muerte como un accidente y engañando a los servicios médicos y a la policía.

Además de limpiar exhaustivamente la casa para eliminar cualquier rastro de sangre, la acusada introdujo a su tía en una maleta de gran tamaño y la trasladó a su hogar en Palma. En ese lugar, realizó varias llamadas: la primera a un centro de salud y la segunda al servicio de emergencias 061 para reportar la muerte de su tía y solicitar un certificado de defunción.

Posteriormente, dejó el cuerpo de su tía, envuelto en toallas, en el garaje de su vivienda, donde fue encontrado más tarde por agentes de la Policía Nacional.

Inicialmente, la mujer había afirmado que había descubierto a su tía caída en la escalera con un fuerte golpe en la cabeza y que, al ver que no respondía, la había envuelto en toallas, arrastrándola escalón por escalón, lo que había provocado más golpes. Sin embargo, más tarde admitió la verdad de lo sucedido.

La acusada, defendida por el abogado Eduardo Luna, tiene antecedentes de problemas relacionados con el consumo de alcohol y trastornos de ansiedad. A pesar de estar bajo tratamiento con antidepresivos, no se han identificado alteraciones en sus capacidades mentales o volitivas.