Desalojada la acampada de la UIB en apoyo a Palestina, la lucha continúa en las calles.

En un giro inesperado, los estudiantes que mantenían una acampada en el campus de la Universitat de les Illes Balears (UIB) han optado por desmontarla y desalojarla este jueves, para llevar su lucha por Palestina a las calles. Sin embargo, han expresado su frustración por la falta de respuesta de la institución y del rector, Jaume Carot, a sus demandas, a quienes acusan de seguir siendo cómplices del genocidio que ocurre en la región.

La decisión de poner fin a la acampada llega después de que la Policía Nacional desalojara a los estudiantes que se habían encadenado en el edificio de Son Lledó, sede del Rectorado, el miércoles por la tarde.

Joseba Peña, uno de los portavoces de Acampada por Palestina, ha reconocido que, a pesar de 15 días de protestas, no han logrado que la UIB condene como genocidio lo que sucede en Gaza. Sin embargo, asegura que esto solo impulsará nuevas movilizaciones y llevará el movimiento estudiantil a las calles y otros espacios públicos.

En esta línea, han anunciado la realización de un festival solidario en Inca este domingo y la organización de charlas en diferentes pueblos para seguir concienciando sobre la situación en Palestina.

El desalojo de la Policía Nacional el miércoles marcó el fin de una protesta que incluyó la ocupación del Rectorado para denunciar la complicidad de la universidad con el genocidio en Palestina, siguiendo el ejemplo de otras protestas en distintas universidades.

La acampada estuvo empañada por incidentes de agresiones y amenazas denunciadas por los estudiantes apenas días después de iniciarse la movilización.

A lo largo de 15 días, se llevaron a cabo diversas actividades, asambleas e iniciativas, incluyendo encuentros con representantes de la institución universitaria, en un intento de hacer escuchar su voz y su causa.