PALMA, 13 Ago.
La Policía Nacional ha detenido a 2 exempleados de una famosa cadena de sitios de comidas en Palma, un hombre de 36 años y una mujer de 32 años, por manejar los tiques y estafar a la compañía cerca de 60.000 euros a lo largo de múltiples años.
Según informó la Jefatura Superior de Baleares en una publicación oficial, los dos usados se dedicaban en teoría a manejar y cambiar los tiques de caja en el momento en que los clientes del servicio habían abonado la cuenta de la comanda que habían consumido.
De este modo, habrían causado a la compañía un perjuicio económico de cerca de 41.000 euros acreditados y cuyo intérvalo de tiempo comprende desde el año 2019 al 2022. Sin embargo, las indagaciones que se están realizando conducen a que los hechos se estaban generando desde el año 2017, con lo que se sospecha que el montante económico de la estafa puede llegar a lograr los 60.000 euros precisamente.
La trama de estos 2 trabajadores, según el relato de los agentes, se descubrió en el momento en que por la parte de la encargada de la mercantil se efectuó un cambio en el sistema informático del cobro de las cajas registradoras de sus locales.
Así, se ha podido conocer que los tiques habían estado siendo manipulados. Observaron entonces que varios de los modelos que constaban en las comandas señalaban importe cero, hecho que extrañó a la empresaria.
A partir de ese momento, la dueña empezó a efectuar una investigación interna en su compañía y recabó todos y cada uno de los tiques de los distintos sitios de comidas. De este modo se percató de que en varios de los locales se generaban esas ediciones de costos y en otros no.
Acto seguido la empresaria, con intención de contrastar los hechos, efectuó 2 acciones al unísono. Por un lado facilitó todos y cada uno de los tiques manipulados a una compañía a fin de que realizara un informe pericial. Así se corroboró la acción de los dos usados.
Por otro lado, se estrechó el circulo de los sitios de comidas donde los tiques habían sido manipulados realizando un registro de los usados que habían efectuado su jornada de trabajo en los diferentes locales hasta el momento en que coincidió con los 2 trabajadores en cuestión.
En este punto llamó la atención que en los establecimientos que éstos trabajaban, las cajas registradoras presentaban tiques con sus importes editados.
Para garantizar la autoría de los hechos, efectuó una comprobación de los tiques de caja en el momento en que los dos trabajadores estaban de vacaciones y las cajas no presentaban a lo largo de la sepa de la pareja manipulaciones, ni rectificaciones con importe cero en ningún recibo.
Ante lo sucedido, y cuando corroboradas todas y cada una de las supones que tenía la empresaria procedió al despido de la pareja, tal como la interposición de la demanda que presentó en dependencias policiales de la Jefatura Superior de Policía de Baleares.
Una vez que el Grupo de Delincuencia Económica y Delitos Tecnológicos tuvo la demanda en la mano, detuvo a los 2 supuestos autores, acusados de estafa y falsedad reportaje. La investigación prosigue abierta y no se desechan novedosas detenciones.