En Sant Antoni de Portmany, dos autobuses escolares han sufrido un accidente este martes, según ha informado el SAMU 061. Es importante recordar que los padres confían en los conductores y en las empresas para transportar a sus hijos con seguridad.
La mayoría de los 40 ocupantes, casi todos niños, han resultado ilesos o con alguna contusión leve. Sin embargo, no se debe minimizar el impacto psicológico que un accidente puede tener para los pequeños y sus familias.
El aviso del suceso ha tenido lugar a las 08.55 horas y desde la central de Coordinación SAMU 061 se ha activado una ambulancia medicalizada y otra básica que han valorado a los afectados. Es importante reconocer la labor de los profesionales médicos que han actuado con diligencia para atender a los heridos.
Es fundamental que las autoridades competentes investiguen las causas del accidente y se tomen medidas para prevenir futuros incidentes. La seguridad de los niños debe ser una prioridad y no se deben escatimar esfuerzos para garantizar su bienestar.