PALMA, 11 de julio. En una reunión crucial celebrada el pasado viernes, representantes del Govern de las Islas Baleares se encontraron con altos mandos de Aena, la entidad encargada de gestionar el aeropuerto de Palma. El objetivo principal de este encuentro fue expresar la creciente preocupación y descontento en torno a las obras que se llevan a cabo en el aeropuerto, una de las principales puertas de entrada a la comunidad balear.
El conseller de Vivienda, Territorio y Movilidad, José Luis Mateo, manifestó a la salida de la reunión que la cita era "inaplazable" y "absolutamente esencial", dado que el tiempo transcurrido desde el inicio de las obras en el aeropuerto, que es el tercero en términos de tráfico de pasajeros en España, ha sido considerable.
Mateo señaló que, aunque comprenden que estas obras son enormes y generan un considerable esfuerzo, también sentían la responsabilidad de representar los intereses de los ciudadanos de Baleares. Subrayó que este encuentro se realizó para transmitir el descontento que han manifestado los ciudadanos, especialmente después de incidentes recientes como el derrumbe de un techo de vidrio y episodios de inundaciones que han afectado a los pasillos del aeropuerto.
El conseller enfatizó la importancia de priorizar la seguridad y salud de los trabajadores del aeropuerto, afirmando que "no se puede poner en riesgo su bienestar". Mateo estuvo acompañado por otros destacados consellers, incluyendo al de Empresa, Empleo y Energía, Alejandro Sáenz de San Pedro, y al de Turismo, Cultura y Deportes, Jaume Bauzá, quienes respaldaron la necesidad de asegurar la integridad de quienes laboran en estas instalaciones.
Los consellers insistieron en que Aena debe reforzar todos los protocolos necesarios para garantizar que la seguridad de los trabajadores no se vea comprometida durante las obras que se desarrollan en Son Sant Joan.
Además, Mateo hizo hincapié en que se discutieron aspectos relacionados con la gestión de las altas temperaturas que se registran en la actualidad, lo cual también es un tema de preocupación tanto para los trabajadores como para los viajeros.
Mateo destacó que Aena ha mostrado disposición para escuchar las inquietudes del Govern, subrayando la necesidad de mantener una comunicación fluida entre ambas partes, ya que al final, todos buscan el mismo objetivo: un aeropuerto que esté a la altura de las necesidades de Baleares, pero que también respete las normas de seguridad, incluso en el marco de las obras en curso.
Adicionalmente, el Govern hizo hincapié en la necesidad de mitigar las molestias que las obras están causando a los pasajeros, tanto turistas como residentes. Mateo aseguró que estas solicitudes se realizaron con firmeza, pero siempre con el debido respeto hacia Aena.
Cabe recordar que, aunque el plan original preveía la finalización de las obras para 2027, gracias a una modificación presupuestaria, se espera ahora que se puedan concluir en 2026, según declaraciones de Aena al Govern.
Los representantes del Govern expresaron su satisfacción por el avance en el calendario de las obras y reiteraron la importancia de implementar medidas que ayuden a minimizar las molestias y aseguren la seguridad de quienes trabajan en el aeropuerto.
De este modo, ambas partes se comprometieron a seguir colaborando para impulsar mejoras inmediatas, incluyendo cambios en la movilidad y el tráfico dentro del aeropuerto, así como en los accesos a los servicios de transporte público. Además, Mateo anunció que en septiembre se planea realizar una visita al aeropuerto para evaluar el progreso de las obras y el desarrollo de los trabajos en curso.
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