Vox ha arremetido contra el Partido Popular (PP) por aliarse con aquellos que, según ellos, mantienen vínculos con figuras controvertidas, aludiendo a MÉS per Mallorca y su conexión con Arnaldo Otegi.

En el Parlament de las Islas Baleares, se ha aprobado, en pleno, la propuesta presentada por MÉS, que busca que la gestión de los aeropuertos de Palma, Ibiza y Menorca pase a ser controlada por la Comunidad Autónoma.

La iniciativa, que ha contado con el respaldo del PP y la abstención del PSIB, busca la transferencia de competencias relacionadas con los aeropuertos y establecer una nueva autoridad aeroportuaria integrada por diferentes niveles de gobierno y el Estado.

El diputado Ferran Rosa de MÉS per Mallorca defendió la propuesta, asegurando que su objetivo no es solo atraer más turismo, sino dotar a las instituciones de las herramientas necesarias para establecer un modelo turístico propio sin restricciones.

Rosa también dirige críticas hacia el PSIB, sugiriendo que su falta de apoyo refleja una falta de interés por abordar el tema de la cogestión en Madrid. Afirmó que esta nueva autoridad permitiría un mejor manejo de las infraestructuras sin centrarse únicamente en el beneficio económico.

El portavoz de MÉS per Menorca, Josep Castells, criticó la visión simplista de que el mercado regula los flujos turísticos. Destacó que las decisiones de las aerolíneas tienen un profundo impacto en la vida de los isleños y que se necesita una gestión más equilibrada de las infraestructuras aeroportuarias.

Castells denunció lo que él considera una desconexión entre la política turística y la aeroportuaria, cuestionando los efectos perjudiciales de la gestión de AENA, especialmente en un contexto donde la saturación de pasajeros crece sin que se tomen medidas efectivas por parte del Govern.

La diputada Margalida Pocoví del PP argumentó que la necesidad de una cogestión aeroportuaria no es una idea nueva y destacó la ineficacia del modelo actual, mencionando varios problemas graves como inundaciones y cortes de electricidad en temporada alta.

Pocoví preguntó por qué en algunas regiones como Cataluña sí se permite la cogestión, insinuando que podría ser un acto políticamente motivado por intereses de votos a favor de Pedro Sánchez.

Por otro lado, el portavoz adjunto de Vox, Sergio Rodríguez, expresó su desagrado por la alineación del PP con un partido que, en su opinión, tiene un pasado cuestionable al reunirse con Otegi. Aseguró que la relación con la izquierda podía tener consecuencias negativas para el futuro de España.

Rodríguez instó al PP a reflexionar sobre el impacto de sus decisiones y sugirió que, al darle instrumentos de poder a la izquierda, se arriesgan a enfrentar serias repercusiones en el futuro.

En su intervención final, Rodríguez también solicitó al PP que considere su propia reforma para hacer del castellano la lengua vehicular en las escuelas, si estaban dispuestos a avanzar con la ley de cogestión.

El portavoz adjunto del PSIB, Marc Pons, también tuvo su oportunidad para hablar, criticando lo que considera una falta de coherencia por parte de MÉS y subrayando que el PSIB apoya la cogestión, pero que la propuesta presentada es demasiado ambiciosa y podría resultar inviable.

Pons advirtió que la iniciativa de MÉS podría carecer de encaje constitucional y se mostró dispuesto a dialogar si realmente se busca un acuerdo que beneficie a la comunidad.

El PSIB, según Pons, ve el respaldo del PP a esta medida como un intento de ocultar sus propias deficiencias en el manejo de la crisis del turismo y la saturación en las islas.