Un nuevo capítulo en el debate sobre el uso de símbolos en las instituciones públicas de Baleares se está desarrollando. El juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Palma ha decidido inhibirse y enviar el caso al Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB). Este procedimiento fue iniciado por el presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, en relación con la polémica decisión de exhibir la bandera LGTBI en el edificio del Parlamento regional.

El tribunal local, en un auto emitido el 6 de octubre, determinó que no tenía competencia en el asunto. A raíz de esto, el TSJIB ha solicitado que las partes involucradas se presenten ante la Sala Contenciosa Administrativa en un plazo de diez días, según un documento firmado este martes.

Este conflicto data de junio de 2024, cuando Gabriel Le Senne presentó un recurso ante el juzgado, en el que solicitaba la retirada de la bandera arcoíris que había sido izada en el Parlamento. Este acto se llevó a cabo con la aprobación de los grupos PP y PSIB, en conmemoración del Día del Orgullo, situación que fue objeto de críticas por parte de Le Senne, asesorado por los servicios legales de Vox.

El recurso estaba fundamentado en el argumento de que la bandera se utilizaba para propósitos partidistas, intentando asociar el símbolo con ciertas ideologías. Le Senne, además, consideró que el apoyo del PP para exhibir la bandera era una auténtica “traición”, ya que existía un acuerdo previo que estipulaba que solo se permitirían símbolos distintos de los oficiales si contaban con un consenso unánime.