En una comparecencia este miércoles en el Parlament, el fiscal superior de Baleares, Julio Cano, ha destacado la preocupante influencia que las redes sociales están teniendo en los jóvenes en relación a trastornos alimentarios y comportamientos autolesivos.
Canal ha presentado las memorias del Ministerio Público de los años 2022 y 2023, donde se ha analizado a fondo la relación de los menores con Internet y las redes sociales, destacando los fuertes impactos negativos en la salud mental de los jóvenes, especialmente tras la pandemia de coronavirus.
La memoria de la Fiscalía ha revelado un aumento en los internamientos involuntarios por trastornos alimentarios, señalando que este fenómeno es solo la punta del iceberg y es necesario abordarlo urgentemente para evitar consecuencias graves a largo plazo.
Según Cano, existen perfiles en las redes sociales que promueven comportamientos peligrosos y adictivos, generando una fuerte dependencia similar a la que experimenta un fumador al encender un cigarrillo. Las recompensas y likes en las redes sociales estimulan la liberación de dopamina en el cerebro, lo que puede llevar a comportamientos dañinos.
El fiscal también ha alertado sobre el aumento en las visitas a urgencias por parte de jóvenes con comportamientos autolesivos, destacando la necesidad de abordar este problema de manera urgente.
En cuanto a la memoria referente al año 2022, Cano ha recordado el enfoque en las personas migrantes y extranjeras, destacando la ruta migratoria desde Argelia hacia Baleares como una preocupación importante y la importancia de mejorar la atención a las mujeres en situación irregular víctimas de violencia machista.
Cano también ha señalado que los extranjeros son el colectivo más vulnerable en cuanto a la vulneración de derechos laborales, subrayando la importancia de abordar esta problemática de manera efectiva.
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