PALMA, 16 de octubre.

En un análisis reciente del Consejo General del Notariado, se ha revelado que las transacciones de viviendas libres por parte de extranjeros en Baleares han sufrido una caída del 6,8% durante el primer semestre del año. Esta tendencia es motivo de preocupación, especialmente en una región que históricamente ha sido un atractivo destino para compradores internacionales.

A pesar de la disminución en Baleares, a nivel nacional se ha observado un incremento del 2% en la compraventa de viviendas libres por parte de extranjeros, alcanzando un total de 71.155 operaciones en toda España. Este contraste subraya las particularidades del mercado inmobiliario balear en comparación con otras comunidades.

El Reino Unido se destaca como uno de los principales países de origen de los compradores, siendo responsable de un gran número de las transacciones en diversas comunidades autónomas, como Murcia (28,7%), Andalucía (15,5%) y Baleares (10,9%). Por su parte, Alemania ha concentrado un 50% de sus operaciones en Baleares y un 29,6% en Extremadura, evidenciando la atracción que estas regiones ejercen sobre los inversores alemanes.

Además, otros países como Rumanía e Italia han mostrado una notable presencia en el mercado. Rumanía, por ejemplo, se ha destacado en Aragón (29,5%) y Castilla-La Mancha (26,2%), mientras que Italia ha encontrado un espacio significativo en Canarias (22,5%) y en Baleares (15,4%). Madrid y Cataluña también cuentan con una participación italiana considerable, alcanzando cuotas de dos dígitos en las respectivas regiones.

Estos datos reflejan no solo las dinámicas del mercado inmobiliario en España, sino también las distintas preferencias de los compradores extranjeros, que continúan influyendo en el panorama del sector en diversas comunidades. La caída en Baleares, sin embargo, podría ser un indicador de cambios más profundos que merecen atención y análisis para el futuro de la inversión en esta región tan valorada.