Los acusados niegan haber violado a una menor en una casa ocupada en Palma: "No es como dicen"

El juicio en contra de los cuatro acusados de violar en grupo a una menor en una "casa de okupas" en Palma ha comenzado con la negación rotunda de los hechos por parte de los procesados. La Fiscalía solicita penas que suman un total de 240 años de cárcel para cada uno de ellos.

En la primera sesión del juicio, que se llevó a cabo a puerta cerrada, los acusados se defendieron alegando que "nada es como se cuenta". La magistrada reconoció el retraso inadmisible de la causa antes de que los acusados respondieran únicamente a las preguntas de sus abogados.

Uno de los procesados, acusado incluso de intentar vender a la víctima por 1.000 euros para prostituirla, negó rotundamente los hechos y aseguró que se ofreció para realizarse pruebas de ADN voluntariamente.

Los acusados argumentaron que en la "casa de okupas" se mantenían relaciones sexuales de forma consentida y que la víctima entraba y salía del lugar por su propia voluntad. Además, se rechazó categóricamente haber facilitado la prostitución de la menor.

Otro de los acusados, que conocía al resto de procesados como "amigos del barrio", señaló que nunca había visto a la víctima antes de los hechos y que no la conocía. El tercer encausado detuvo su declaración por motivos de salud y detalló que el lugar de los hechos era una casa de okupas.

Finalmente, el último acusado en prestar declaración negó enérgicamente los hechos y explicó que se marchó a casa porque su pareja le llamó. Posteriormente, la declaración de la víctima se llevó a cabo a puerta cerrada.

La Fiscalía solicita penas tan severas debido a considerar a cada uno de los procesados como autor de un delito de agresión sexual y cooperador necesario en la participación de los otros tres, por tratarse de una violación colectiva simultánea.

Los hechos tuvieron lugar en enero de 2016, en el domicilio de uno de los acusados, según la acusación de la Fiscalía. Los chicos forzaron la puerta con un palo y obligaron a la víctima a mantener relaciones sexuales con todos ellos, a pesar de su negativa inicial.

La víctima, que tenía menos de 16 años en ese momento, quedó en estado de shock tras la violación múltiple y ha recibido tratamiento psicológico como consecuencia de los traumáticos sucesos. La Fiscalía también identificó una agravante de trato vejatorio y actuación conjunta de varias personas en este caso.