PALMA, 16 Mar.
La Asociación de Constructores de Baleares ha publicado este jueves un llamamiento "atormentado" frente la carencia de mano de obra cualificada y n cualificada. "No podemos encontrar ni peones", aseguró en una rueda de prensa la presidenta de la Asociación, Fanny Alba.
Los constructores hicieron cómputo de la actividad del 2022 y han movido las previsiones para este año, realizando particular hincapié en la carencia de mano de obra y la "imposibilidad" de sacar vivienda accesible al mercado por la carencia de suelo.
Según han concretado, Baleares precisa hoy entre diez.000 y 15.000 trabajadores en el campo de la construcción y por el momento no únicamente concretes cualificados como meses atrás, sino más bien de todo género de concretes.
"No comprendemos como un país con tres millones de parados, la mayor parte de campos no hallan trabajadores", ha añadido Alba.
En relación a la carencia de suelo, la directiva general, Sandra Verger, ha criticado el empleo de la figura del decreto ley para desclasificar urbanizables y su encontronazo en la menor disponibilidad de suelo. "No fué la forma correcta, se hizo a espaldas del campo", aseguró.
Además, ha añadido, la urgencia habitacional forzará a reconducir la restricción de desarrollo en altura, si bien sea en ciertas áreas.
La Asociación de Constructores ha advertido del mismo modo que la inversión en vivienda de protección oficial todavía es "deficiente", en tanto que únicamente está sirviendo para atender las pretensiones de las clases mucho más atacables y no de la enorme mayoría de la población, que asimismo tiene adversidades para entrar a la vivienda.
En este sentido, han solicitado un enorme pacto de estado en un largo plazo y una angosta colaboración público-privada para eludir una quiebra total del ingreso a la vivienda.
También han alertado de una "cascada" de licitaciones desiertas por la carencia de actualización de costos que, al lado de la carencia de mano de proyectos y el valor de los materiales, puede derivar en una "tormenta impecable".
