En Madrid, el 29 de julio, se ha generado un importante revuelo político después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ofreciera su firme apoyo al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ante la amenaza de un juicio por un presunto delito de revelación de secretos. Sánchez aseguró ante los medios que confían plenamente en la inocencia de García Ortiz.

Durante su encuentro veraniego con el Rey Felipe VI en el Palacio de Marivent, Sánchez dejó claro que el Gobierno de España respalda incondicionalmente al fiscal general. “Contamos con su profesionalismo y su compromiso”, afirmó el presidente, en un momento en que la situación de García Ortiz se complica judicialmente.

Las declaraciones del presidente se produjeron tras la confirmación del Tribunal Supremo de la decisión del magistrado Ángel Hurtado, que ha decidido procesar a García Ortiz por supuestos actos de revelación de secretos relacionados con Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Las acusaciones que enfrentaría García Ortiz son serias, ya que se plantea una pena de hasta seis años de prisión, argumentando que el fiscal coordinó activamente la filtración de información sobre la investigación fiscal que afecta a González Amador.

A pesar de las dificultades legales que enfrenta García Ortiz, el Gobierno ha mantenido un discurso de apoyo constante, reiterando su respaldo público e incluso afirmando que estarán a su lado hasta el final, incluyendo en el eventual caso de que el juicio se lleve a cabo.