La parte da un giro cerca de los contactos en la Isla de entre los acusados, J.E.F.S., para quien el fiscal solicita prácticamente 11 años de prisión
PALMA, 30 Ene.
Tres de los 16 acusados por una presunta red de distribución de cocaína, hachís y mariguana en diferentes puntos de Mallorca han reconocido este lunes que cooperaron en la actividad de narcotráfico, más allá de que el resto se ha desligado y ha defendido su inocencia.
La Fiscalía solicita penas que suman 113 años y diez meses de prisión y multas de 25,3 millones de euros para 16 personas acusadas de ayudar en este entramado de narcotráfico. Se trata de múltiples conjuntos separados, cuyo primordial nexo en común es un vecino de Palma, J.E.F.S., para quien el fiscal solicita diez años y nueve meses de prisión y una multa de 2,3 millones de euros.
La Sección Primera de la Audiencia Provincial empezó este lunes el juicio. Al comienzo, múltiples de las defensas han planteado la nulidad de pinchazos telefónicos y registros domiciliarios, demandando que se anulen por su parte todas y cada una de las actuaciones derivadas. La Sala resolverá esta solicitud en sentencia.
Tres de los acusados han reconocido haber participado en las ocupaciones ilegales; 2 de ellos, tras llegar a un convenio de conformidad con la Fiscalía. El tercero ahora había confesado, en el mes de febrero de 2022, haber trapicheado con sustancia, y ha desligado a su ex- pareja y su familia, asimismo encausados, aseverando que no sabían nada de sus ocupaciones.
El resto han negado cualquier implicación con tráfico de drogas, y dieron variadas explicaciones a los rastros recogidos por la investigación.
El escrito del fiscal se distribuye en múltiples bloques, todos ellos relacionados con J.E.F.S., de quien asegura que "desplegaba una incesante actividad de abastecimiento" de cocaína, hachís y mariguana a 2 puntos de venta en el poblado de Son Banya, uno regido por F.A.F, popular como 'Gordito', y su madre; y otro por Z.G.F., F.G.L. y otra persona investigada que está fugada. Una de estas personas ha aceptado los hechos y ha implicado a otros 2 encausados que se declaraban inocentes.
Fruto de las indagaciones de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) la Policía interceptó a usuarios de sustancia en estos puntos de venta.
A J.E.F.S. asimismo se le relaciona con un ciudadano marroquí que vendía sustancia 'al menudeo' en una calle anexa a su hogar en Porreres, a la que en teoría asistían los usuarios tras entrar en contacto por teléfono. El marroquí pertence a los procesados que alcanzó un convenio con la Fiscalía, y ha reconocido que adquirió cocaína y mariguana a J.E.F.S.
Por otra sección, la Fiscalía mantiene que J.E.F.S., por su parte, se proveía de sustancia por 2 canales. El primero, una composición de envíos postales de cocaína y hachís que proceden de la Península para lo que en teoría contaba con el apoyo de otros 2 encausados.
Presuntamente, esos 2 ayudantes se ocupaban de conseguir personas que, en lugar de una compensación económica, admitían prestar sus datos para el remite o destino de los packs. Varios de esos receptores aparecen entre los encausados.
Uno de ellos fue detenido en el momento en que hizo la obtenida de un envío en el tercer mes del año de 2021. Los agentes hallaron en el bulto 54 tabletas de resina de cannabis y cocaína rosa por un valor de prácticamente 650.000 euros.
Según la Fiscalía, simultáneamente, J.E.F.S asimismo adquiría cocaína a otros 2 acusados, padre y también hijo, quienes asimismo se dedicaban al tráfico de sustancia tanto a la venta directa como en peldaños intermedios.
En este conjunto el fiscal incluye a la pareja del hijo, a la que acusa de efectuar trabajos de contacto con los usuarios y tareas logísticas; y a la madre y a su novedosa pareja, por en teoría custodiar la substancia en un hogar de Palma. "Una composición familiar clausurada y bien estructurada, que dejaba achicar el peligro inseparable a la actividad creada", concluye la Fiscalía.
En mayo de 2021 se hicieron registros policiales en los diferentes puntos de actividad de la red, interviniendo diferentes proporciones de heroína, cocaína y cannabis, tal como dinero en efectivo y útiles para la preparación de la sustancia.
Dos de los acusados tienen antecedentes anteriores por tráfico de drogas. Para varios de los procesados la fiscalía solicita multas que individualmente sobrepasan los 3,3 millones de euros.