PALMA, 5 de noviembre. En una reciente intervención, Joan Gaià, coordinador de Unió de Pagesos, ha expresado su profunda preocupación por el anunciado cierre de Agama, calificándolo como un grave ataque a la soberanía alimentaria de Baleares.

Durante su comparecencia en la Comisión no Permanente de Cambio Climático sobre Agricultura, Ganadería y Pesca del Parlament, Gaià destacó la urgente necesidad de abordar los retos que enfrenta el sector agrario, además de detallar su inquietud sobre la situación de la industria lechera local.

“¿Qué nación puede darse el lujo de prescindir de su sector lácteo? Este es un pilar fundamental en nuestros mercados, un producto que ha sido clave tanto para el sector estatal como para el de Mallorca”, enfatizó Gaià.

Con un tono irónico, cuestionó: “¿Qué comunidad decide cerrar su industria lechera? Nuestra actitud de indiferencia es desconcertante”, señalando que este tipo de decisiones carecen de sentido común.

El coordinador criticó la falta de autocrítica en la situación actual y sugirió que pocos han tenido la valentía de alzar la voz en contra del cierre de Agama. “Los intereses de una corporación no deberían prevalecer sobre los de nuestra gente. Cerrar Agama es, de hecho, un acto contra la soberanía alimentaria de Baleares”, remarcó.

Lejos de proporcionar datos técnicos a los parlamentarios, Gaià se centró en transmitir la realidad diaria que enfrentan los agricultores, buscando que los miembros de la comisión comprendieran que el sector primario es esencial en la lucha contra el cambio climático.

“No hay suficiente conciencia sobre la importancia del sector primario”, argumentó, resaltando que a pesar de su tamaño relativamente pequeño, este sector gestiona el 80% de la superficie de las islas, lo que representa una verdad importante no solo por su producción alimentaria, sino también por su rol en la preservación del territorio y la prevención de incendios. “No podemos permitir que nuestros campos queden en el abandono”, concluyó.

Gaià también alertó sobre las pérdidas económicas que el cambio climático impone a los agricultores, citando un caso concreto donde un viñedo reportó una drástica disminución del 90% en sus ingresos debido a la baja cosecha de este año.

“¿Se imaginan lo que sucedería si los hoteleros enfrentaran una caída del 90% en sus ingresos? La reacción sería inmediata de parte de todos: desde el Consolat hasta el Parlament. Pero quienes enfrentan las consecuencias del cambio climático siguen desatendidos mientras otros se benefician de la prolongación de las temporadas turísticas”, explicó Gaià.

Al inicio de su intervención, Gaià pidió disculpas a los diputados, señalando que a su juicio, la creación de esta comisión estuvo “mal encaminada”. Criticó la elección de un presidente que, en su opinión, no tiene fe en la comisión, haciendo referencia al diputado de Vox, Sergio Rodríguez, quien a su juicio sólo mostró desinterés en la problemática.

Cabe recordar que el 23 de septiembre, el grupo de Santiago Abascal decidió abandonar la comisión, argumentando que se había convertido en un espacio que promueve ideologías de la Agenda 2030. “Nos oponemos a estas estructuras que desatienden las necesidades del pueblo, en favor de una agenda ideológica que a nuestro juicio es perjudicial”, dijeron en ese momento.