Palma, 18 de octubre. La colaboración entre la Guardia Civil y la Policía Local de Palma ha culminado en la desarticulación de un considerable punto de vertido y gestión ilegal de residuos en la área de Son Reus, donde se hallaron escombros, vehículos, embarcaciones e incluso tres ponis en condiciones deplorables.

Esta operación, impulsada por el Grupo de Investigación y Seguimiento de Denuncias del cuerpo municipal, en conjunto con el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) del Instituto Armado, inició hace aproximadamente un año, enfocándose en una finca rústica que se sospechaba estaba involucrada en actividades ilícitas.

El 30 de julio, como parte de la investigación, se realizó una inspección del sitio, lo que permitió a las autoridades confirmar que efectivamente operaba como un vertedero ilegal de grandes proporciones.

La inspección reveló la acumulación de más de 1.000 metros cúbicos de escombros, incluidos restos de fibrocemento, arena de sílice, una variedad de vehículos, embarcaciones y los mencionados ponis, que eran parte de la fauna en condiciones de abandono. La utilización de drones por parte de la policía local proporcionó pruebas visuales clave que resultaron decisivas en este caso.

Los investigadores han logrado identificar a las personas presuntamente involucradas en la gestión de la finca, quienes ahora enfrentan cargos por vulnerar la legislación autonómica sobre residuos y suelos contaminados.

Desde la Policía Local, se ha subrayado que esta operación refleja el firme compromiso de ambas instituciones en la defensa del medio ambiente y la erradicación de actividades ilegales que amenazan la integridad del entorno natural y la salud pública de los ciudadanos.