Mujer condenada por incendiar su vivienda con personas dentro en Pollença, recibe pena de tres años de cárcel.
Una mujer de 46 años ha sido condenada a tres años de cárcel por incendiar la vivienda en la que residía en Port de Pollença (Mallorca), mientras varias personas dormían en su interior.
La condena ha sido aceptada por la acusada este miércoles, después de que las partes llegaran a un acuerdo en la vista celebrada en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares. Inicialmente, se pedían 15 años de prisión para la acusada.
Este caso ha tardado diez años en llegar a juicio, ya que el incidente ocurrió en junio de 2013, y la causa judicial ha sido paralizada en diferentes momentos. Por esta razón, se ha considerado como atenuante las dilaciones indebidas.
También se ha reconocido como atenuante la reparación del daño, ya que la mujer ha consignado 5.700 euros como compensación por los daños causados, de una indemnización total de 7.215 euros. Además, se ha considerado otra atenuante por abuso de alcohol.
A pesar de la condena, la acusada no ingresará en prisión, ya que se le ha otorgado el beneficio de suspensión de la pena, siempre y cuando no cometa ningún otro delito en los próximos cinco años, pague todas las compensaciones a la propietaria de la vivienda y siga un tratamiento de deshabituación del alcohol, que según su defensa, ya ha comenzado.
La mujer ha admitido que prendió fuego a una cortina y a muebles en una habitación del sótano de la vivienda a las 06:05 horas del 24 de junio de 2013. El incendio se propagó rápidamente a las demás habitaciones y alcanzó las plantas superiores. A pesar de ser consciente de que había otras personas dentro, la acusada escapó sin alertar a los demás residentes.
Una mujer de 62 años se despertó debido al calor y se percató de que la casa estaba en llamas. Gritó para alertar a los demás. Además de ella, en la vivienda también se encontraban un hombre de 65 años y su nieto de 12 años, quienes se despertaron cuando comenzaron a escuchar golpes en la puerta y el humo ya había comenzado a entrar. Otra persona también residía en el domicilio, pero en ese momento no se encontraba allí.
Debido a la densidad del humo, los ocupantes de la vivienda no pudieron bajar al piso inferior y tuvieron que subir al piso de arriba para luego salir al tejado, donde fueron rescatados por la Guardia Civil.
Los bomberos de Alcúdia e Inca acudieron al lugar y extinguieron el incendio. El sótano de la vivienda quedó completamente calcinado y el mobiliario reducido a cenizas, además de otros daños.
Los residentes en la vivienda no sufrieron ninguna lesión y han renunciado a ejercer acciones civiles. La propietaria necesitó tratamiento farmacológico debido a la ansiedad generada por este episodio. La incendiaria fue detenida el mismo día y se le retiró el pasaporte por orden judicial.