IBIZA, 9 de abril.

La policía ha iniciado hoy un desalojo en el asentamiento conocido como Can Rova 2, ubicado en el municipio de Santa Eulària, en la isla de Ibiza.

Este operativo cuenta con el respaldo del Juzgado contencioso administrativo número 1 de Palma, que ha dado luz verde a la acción tras la solicitud del Ayuntamiento de Santa Eulària.

El asentamiento, que ya había sido objeto de un desalojo en el verano de 2024, se había consolidado como una ocupación ilegal en la zona.

Tras el primer desalojo, el Consistorio propuso una sanción de 905.137 euros al promotor y al gestor del asentamiento, como consecuencia de una grave infracción de la normativa urbanística. Además, el Govern de les Illes Balears impuso una multa aún más contundente, de 2,4 millones de euros.

Un informe elaborado por el Ayuntamiento reveló que la parcela, que abarca 26.000 metros cuadrados, estaba clasificada como Suelo Rústico Común, dentro de un Área de Transición. Las inspecciones llevaron a la conclusión de que carecía de las licencias necesarias para cualquier tipo de construcción, contando con un total de 103 elementos utilizados para alojamiento, que incluían desde casetas de madera hasta caravanas, autocaravanas y tiendas de campaña, además de un contenedor. Los ocupantes revelaron que el encargado del lugar cobraba entre 500 y 700 euros al mes por cada una de estas instalaciones.

Tras el desalojo anterior, algunos de los residentes se trasladaron a un terreno cercano que también lleva el nombre de Can Rova 2, donde se han asentado nuevamente.