La alcaldesa de Felanitx defiende su postura ante acusaciones de amenaza a la policía local, mientras los socialistas denuncian un "maltrato".

La controversia en torno a la alcaldesa de Felanitx, Catalina Soler, ha alcanzado un punto crítico tras las denuncias mutuas entre ella y un oficial de la Policía Local. La Guardia Civil será la encargada de investigar el caso debido a la imposibilidad del cuerpo municipal de hacerlo, dado que uno de sus miembros está implicado.
En el contexto de una fiesta celebrada en Portocolom, la alcaldesa ha defendido su posición, asegurando que no amenazó ni insultó al agente, aunque admitió haberle reprochado su ausencia en las labores de patrullaje, que eran su responsabilidad aquella noche.
Por parte de la oposición, el grupo socialista ha tomado una postura firme, afirmando que las declaraciones de Soler ratifican las "coacciones" denunciadas por el agente y han exigido su renuncia, calificando el incidente de "maltrato" hacia un servidor público.
Estos eventos fueron discutidos en un pleno extraordinario del Ayuntamiento de Felanitx, donde Soler fue llamada a clarificar lo ocurrido durante el Raïm Wine Fest, celebrado el pasado 12 de julio. Las versiones de los hechos continúan generando confusión entre los representantes locales.
A pesar de las acusaciones en su contra, la alcaldesa ha negado ser culpable de alguna irregularidad, defendiendo que el informe del agente omite detalles relevantes de la conversación, en la que ella también fue objeto de un comentario considerado "sexista" por su parte. Este incidente ha llevado a la regidora de Igualdad a convocar un comité interno para investigar la situación.
María Gracia González, portavoz del grupo socialista, ha manifestado que las explicaciones de Soler validan el relato descrito en el informe del oficial, aludiendo a las "amenazas y coacciones" que supuestamente sufrió, lo que sería un acto grave hacia un trabajador en servicio.
La portavoz ha señalado la gravedad de los hechos al considerar inapropiado que la alcaldesa participe en lo que ella denomina un "acoso" a alguien en función de su cargo. González también ha manifestado su decepción por lo que percibe como evasión de responsabilidades por parte de Soler.
En cuanto a los comentarios sexistas mencionados por la alcaldesa, González considera que, si son ciertos, requerirían una condena rotunda por parte de su partido, sugiriendo que el agente podría no estar en condiciones de servir en su rol si se confirman esos hechos.
No obstante, la portavoz del PSIB ha expresado sus dudas sobre la veracidad de las afirmaciones de Soler, insinuando que podrían ser una táctica de defensa para desvirtuar el informe que la incrimina. “No puedo condenar algo que no está claramente verificado”, ha declarado, enfatizando que la alcaldesa parece intentar esquivar la responsabilidad de lo que se ha documentado oficialmente.
Frente a esta situación, el grupo municipal socialista ha reiterado su pedido de dimisión para Soler, quien previamente había descartado esa posibilidad. González también ha criticado el comportamiento de la alcaldesa durante el pleno, describiéndolo como desafiante y poco respetuoso con los miembros de la oposición.
Por su parte, Soler ha manifestado su intención de llevar el asunto a los tribunales, mientras que el caso ha sido asignado a un Juzgado de Manacor para su investigación. El oficial implicado ha presentado sus declaraciones ante el juez, y la alcaldesa se ha personado en el procedimiento de forma particular.
La Guardia Civil se encarga de la pesquisa, ya que la Policía Local no puede intervenir directamente en el caso debido a la vinculación de uno de sus oficiales. A raíz de esto, los socialistas han advertido que Soler está considerando que el Ayuntamiento de Felanitx se sume al caso judicial, lo cual, según González, podría resultar en una confusión de intereses entre su papel personal y el rol que ocupa en la administración pública.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.