En Palma, desde el inicio del verano, la Policía Local ha tomado medidas significativas para combatir la venta ambulante ilegal, sancionando a 23 individuos por adquirir productos de estos vendedores no autorizados. Esta acción es parte de la nueva normativa que busca fomentar la convivencia cívica en la ciudad y que, por primera vez, establece multas para quienes compran en este tipo de comercio.

La ordenanza, que entró en vigor a finales de mayo, impone sanciones que van de 450 a 750 euros, categorizando la compra de productos de la venta ambulante como una infracción leve. El Ayuntamiento de Palma ha expresado su intención de desincentivar esta práctica tanto entre compradores como vendedores, evidenciando un enfoque proactivo en la regulación de la actividad comercial en la ciudad.

Durante un operativo llevado a cabo el pasado 7 de junio en Playa de Palma, cinco compradores fueron identificados y sancionados. Posteriormente, agentes del Equipo Comunitario de Proximidad extendieron la acción en la segunda mitad de junio, levantando actas a 14 personas en s'Hort del Rei y Parc de la Mar, además de sancionar a cuatro más en la Plaza Mayor.

Hasta la fecha, la Policía ha documentado un total de 51 actas contra vendedores ambulantes ilegales en diversas zonas, siendo las más afectadas Parc de la Mar, s'Hort del Rei y Playa de Palma. De hecho, un operativo reciente realizado el 16 de julio en Playa de Palma resultó en cinco denuncias por juego ilegal y un total de ocho infracciones por diversos motivos, cinco de ellas vinculadas al incumplimiento del vigente Decreto de Turismo Responsable.

Las intervenciones han llevado a la incautación de miles de productos relacionados con esta actividad ilícita. Según ha comunicado el Ayuntamiento de Palma, estas acciones reafirman su firme compromiso en la lucha contra la venta ilegal y en la protección de los comercios locales, que se ven perjudicados por esta competencia desleal.