PALMA, 16 de julio. La presidenta del Govern de Baleares, Marga Prohens, ha afirmado enérgicamente que su Gobierno utilizará todos los recursos posibles para oponerse al reparto de menores migrantes no acompañados, defendiendo esta postura como un acto de "responsabilidad y humanidad".

Durante un evento para firmar un convenio con la Seguridad Social, Prohens enfatizó que estos son "niños, no paquetes", criticando a las autoridades que manejan el asunto como si se tratara de simples objetos. Estas declaraciones surgen en el contexto de la próxima Conferencia Sectorial de Infancia y Adolescencia programada para este jueves.

Prohens fundamentó su rechazo al reparto de menores en el deber de tratar a todas las personas, especialmente a los más jóvenes, con dignidad y respeto. Subrayó la importante carga que enfrenta Baleares ante un fenómeno migratorio sin precedentes en la región.

La líder regional también expresó su descontento hacia el Gobierno de España, sugiriendo que el trato que reciben estos menores es equivalente a la manipulación de mercancías. Remarcó que la redistribución de menores no resuelve la problemática actual y, en su opinión, el Ejecutivo debe centrarse en tres áreas vitales: asegurar las fronteras, combatir el tráfico de personas y establecer una política migratoria real y efectiva.

Además, instó al Gobierno central a buscar un consenso interno, criticando la contradicción de que, mientras que el Ministerio de Infancia afirma que Baleares está sobrecargada con más de 200 menores, inmediatamente después se anuncia el envío de más menores a la comunidad. Prohens concluyó con una firme determinación: "Aquí no aceptaremos ser considerados una comunidad de segunda".