La presidenta del Govern balear, Marga Prohens, ha respondido con firmeza a las declaraciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien insinuó que las comunidades autónomas que se opongan a aceptar a un grupo de 49 menores extranjeros no acompañados provenientes de Canarias y Ceuta enfrentarían "consecuencias".

Prohens manifestó su firme postura en contra de estos "repartos impuestos" a través de un mensaje en su cuenta oficial de la red X, afirmando que seguirán denunciando esta situación y buscarán todos los medios necesarios para evitar la asignación forzada de estos menores. "A pesar de las amenazas, mantendremos nuestra posición", subrayó la presidenta.

En la rueda de prensa posterior a su encuentro con Sánchez y el Rey Felipe VI, este advirtió sobre las implicaciones que enfrentaría Baleares si decidiera hacer caso omiso a la normativa que regula el traslado de migrantes. Para Prohens, estas palabras constituyen un ataque directo no solo a su persona, sino a la comunidad insular que ha lidiado con el crecimiento de una ruta migratoria desde Argelia, culpando al Gobierno de la falta de protección de las fronteras españolas.

La presidenta insistió en que las amenazas del Ejecutivo no contribuyen a resolver la crisis migratoria ni a desmantelar las redes de tráfico humano. "Ignorar la situación de las Islas no nos ayuda a enfrentar esta crisis ni a prevenir que el sufrimiento humanitario de Canarias se extienda hacia Baleares", concluyó, reafirmando su compromiso con la defensa de su comunidad.