En Palma, el día 3 de junio, la Guardia Civil, en colaboración con agentes de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, ha llevado a cabo un operativo que ha resultado en la detención de tres individuos y la confiscación de 3,6 kilogramos de hachís. Estos esfuerzos fueron coordinados por la Unidad de Análisis e Investigación Fiscal y de Fronteras, conocida como Udaiff.

Según el comunicado oficial, el operativo se inició durante una inspección rutinaria en una empresa de paquetería ubicada en Mallorca. Durante la revisión de un envío que despertó sospechas en los agentes, un perro especializado en la detección de drogas alertó sobre un paquete que contenía diez tabletas envasadas al vacío, con un peso total de 969 gramos de una sustancia de color marrón.

Una vez incautado, se realizó un análisis que confirmó que la sustancia era hachís, lo que llevó a los investigadores a iniciar una indagación más profunda. Esto culminó en la identificación y arresto de un individuo en la capital balear, quien fue acusado de un delito contra la salud pública y posteriormente presentado ante las autoridades judiciales.

El trabajo de las fuerzas del orden no se detuvo allí. En otra acción conjunta en una distinta empresa de paquetería, los agentes identificaron un paquete con características que sugerían el tráfico de sustancias prohibidas. Al ser sometido a un escáner de rayos X, se halló material sospechoso, y tras abrir el paquete, se encontraron 2,642 kilogramos de hachís, distribuidos en 37 tabletas selladas al vacío, además de seis porciones adicionales. El contenido fue validado mediante pruebas específicas de narco test.

Como resultado de esta segunda operación, dos personas fueron detenidas en la jurisdicción del partido judicial de Inca y también fueron enviadas a disposición judicial. Las investigaciones siguen en curso, y no se descartan más arrestos en los próximos días, subrayando la determinación de las autoridades para combatir el narcotráfico en la región.