PALMA, 27 de octubre. Durante la presente semana, las Islas Baleares disfrutarán de un clima predominantemente estable y con temperaturas superiores a las que se suelen registrar en esta época del año, al menos hasta el miércoles. A partir de entonces, la llegada de una vaguada traerá lluvias con barro y posibles tormentas que afectarán la isla por un par de días.

Esta información fue compartida por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), cuya representante en Baleares, María José Guerrero, comunicó a Europa Press que el viernes y el fin de semana se espera un retorno a la estabilidad y buen tiempo.

La semana comienza con cielos mayormente despejados y temperaturas que fluctúan entre los 20 y 23 grados en su máxima, mientras que las mínimas oscilarán entre los 8 y 16 grados. Estos valores son notablemente más altos que las medias habituales para la temporada, donde se suelen registrar 22 grados de máxima y 13 de mínima. Esta tendencia se mantendrá el martes, con un viento suave de dirección variable.

Sin embargo, a partir del miércoles se anticipa un cambio en el panorama meteorológico, ya que se prevé la llegada de una masa de aire cálido del sur, así como la mencionada vaguada. Esto dará lugar a un cielo más cubierto y a la posibilidad de lluvias débiles y ocasionales, potencialmente acompañadas de barro.

El jueves, la misma vaguada podría inducir la formación de chubascos, y las tormentas no se descartan durante estas jornadas. En estos dos días, las temperaturas continuarán superando lo normal, alcanzando los 24 a 26 grados en su máxima y de 13 a 19 grados en su mínima. Además, el viento será moderado del suroeste, con intervalos que podrían ser intensos.

La estabilidad regresará a las Baleares el viernes, con la presencia de nubes medias y altas, y se pronostica que las temperaturas máximas se mantendrán entre 24 y 26 grados, con mínimas de 15 a 20 grados. De igual forma, el fin de semana se presentará con un clima estable y temperaturas elevadas que continuarán siendo la tónica dominante.