PALMA, 25 de agosto.

Recientemente, dos caporales del cuerpo de Bomberos de Mallorca compartieron su experiencia tras participar en la intensa lucha contra los incendios forestales en la región de Castilla y León. A través de sus declaraciones, destacaron los retos y la magnitud de las llamas que enfrentaron, lo que dejó una profunda impresión en ellos.

Toni Pujol, uno de los caporales, relató las adversidades que padeció, incluyendo problemas de salud derivados de la inhalación de humo y polvo. Sin embargo, gracias a la rápida atención médica, pudo recuperarse y regresar rápidamente a la acción. “Curé la herida y volví a la guerra”, afirmó, reflejando su compromiso con la misión.

A pesar de las dificultades, los bomberos también expresaron su gratitud por el respaldo de la ciudadanía local, el cual calificaron como “maravilloso”, mostrando así el sentido de comunidad y colaboración en tiempos de crisis.

Por otro lado, Guillem Mas, otro de los caporales, detalló que su equipo se centró en proteger las localidades más amenazadas por los incendios recurrentes. Resaltó que la coordinación fue “perfecta”, lo cual fue crucial para implementar técnicas de extinción que, en su mayoría, no se aplican en Baleares debido a las diferencias en el paisaje.

El conseller insular de Función Pública, Rafel Bosch, no dudó en reconocer el esfuerzo y la dedicación de los 37 bomberos que se desplazaron para combatir estas llamas. Afirmó que, a pesar de la difícil situación que enfrentaron, “hicieron un trabajo magnífico” y que su actuación contribuyó a elevar el prestigio de Mallorca en estas circunstancias tan desafiantes.