
El presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba, ha afirmado que el secretario de la institución insular le ha explicado que no se le ha encargado ningún informe en relación al expediente de expulsión que pretende presentar Sa Unió contra él. Córdoba ha calificado esta situación como absurda e incomprensible, ya que sigue siendo el presidente elegido por mayoría absoluta en las elecciones.
Según Córdoba, la posible expulsión podría complicar mucho el funcionamiento diario del Consell. Sin embargo, ha dejado claro que no dimitirá y que ni la oposición ni el PP balear han solicitado su dimisión. Afirmó que los únicos en cuestionar su continuidad son los ocho consellers de Sa Unió, quienes se niegan a aceptar que han cometido un error. Además, Córdoba ha instado a Sa Unió a presentar las pruebas que dicen tener ante la Fiscalía si creen que ha cometido irregularidades.
El presidente ha expresado su descontento con la situación actual en Formentera, afirmando que nadie la comprende, ni siquiera los miembros de Sa Unió. A pesar de todo, ha dejado de pedir la dimisión de dos consellers de la coalición política con el objetivo de cerrar la crisis.
Córdoba ha concluido diciendo que es hora de cerrar esta crisis y ponerse a trabajar para cumplir con el mandato dado por los ciudadanos. Ha animado a aquellos que estén dispuestos a colaborar a que continúen haciéndolo, y a los que no, a que se vayan y sean reemplazados por otros de la lista. Considera que esta situación empieza a ser absurda y deben superarla.
La coalición política Sa Unió anunció la semana pasada que presentaría pronto un expediente de expulsión contra el presidente de la coalición política. Sin embargo, aún están esperando a concluir algunos informes antes de presentarlo.
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