
En Menorca, un preocupante caso ha salido a la luz, con cinco chicas afectadas, de las cuales cuatro son menores de edad. Sin embargo, los presuntos responsables lograron manipular fotografías de apenas tres de estas víctimas.
MENORCA, 28 Ago.
La Policía Nacional está llevando a cabo una investigación en Maó tras el descubrimiento de que dos adolescentes habrían utilizado un programa de inteligencia artificial para alterar imágenes de varias jóvenes, con la intención de despojarlas virtualmente de su ropa.
Todo comenzó a principios de año cuando una menor presentó una denuncia en la comisaría. La chica reveló que un amigo tenía en su móvil una serie de fotos de diferentes chicas, incluyéndola a ella, completamente desnudas.
La joven, según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Baleares, tuvo acceso al teléfono del sospechoso en un momento en que intercambiaban sus dispositivos, una práctica habitual entre ellos. Fue en ese momento cuando se percató de las imágenes perturbadoras.
Ante esta situación, la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM) inició una investigación que permitió identificar al principal sospechoso, otro menor de edad, quien se cree que obtuvo las fotografías a través de diversas redes sociales. Posteriormente, empleó un programa de inteligencia artificial para manipular las imágenes y presentarlas de forma indecente.
Aunque hay cinco chicas implicadas en este caso, solo se pudo completar el proceso de manipulación con tres de ellas. Las víctimas han afirmado que sus fotos nunca fueron tomadas en ese estado y que no estaban al tanto de que fueran almacenadas por el sospechoso.
La indagación ha establecido que, si bien el menor solo modificó y guardó estas imágenes, no llegó a difundirlas. Por su parte, otro menor, amigo del principal sospechoso, también realizó acciones similares con fotos de otras jovencitas.
Los investigadores han tomado declaración a ambos adolescentes, quienes están siendo considerados como posibles perpetradores de un delito de pornografía infantil. Las diligencias han sido enviadas a la Fiscalía de Menores para su debido procesamiento.
La Policía recuerda que comportamientos como este siempre constituyen un delito, reiterando que el mal uso de las redes sociales y las tecnologías de inteligencia artificial pueden acarrear graves consecuencias penales.
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