Un hombre de nacionalidad ucraniana ha sido arrestado por la Policía Nacional en Palma, bajo la sospecha de haber perpetrado una serie de siete robos en la playa de Cala Major. Los cargos en su contra no solo incluyen hurtos a bañistas desprevenidos, sino también estafas bancarias, ya que utilizaba tarjetas robadas para realizar compras y solicitaba dinero a sus víctimas para devolver los objetos que había sustraído, tales como documentación y llaves de vehículos de alquiler.

La investigación, llevada a cabo por el Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Distrito Oeste, se inició tras un alarmante incremento en las denuncias de robos en la mencionada playa. Los agentes se dieron cuenta de que el patrón de estos delitos se repetía: los bañistas dejaban sus pertenencias en la arena mientras se sumergían en el agua y, al regresar, se encontraban con que sus objetos habían desaparecido.

La mayoría de las víctimas eran turistas que, tras ser despojados de su dinero, tarjetas y otros efectos personales, se quedaban sin recursos necesarios para continuar su estancia en la isla. La situación se complicaba aún más, ya que el ladrón también se llevaba las llaves de los coches de alquiler, lo que obligaba a los afectados a afrontar costes adicionales para recuperar las llaves de las compañías de alquiler.

Los problemas no terminaban ahí; en algunos casos, el sospechoso utilizaba las tarjetas de las víctimas para realizar compras en los comercios cercanos a la playa. En una situación particularmente indignante, un visitante tuvo que pagar 100 euros al ladrón para recuperar su documentación personal, lo que destaca la gravedad de sus acciones.

Con el fin de esclarecer estos delitos, los investigadores realizaron numerosas indagaciones que llevaron a identificar al presunto autor. Finalmente, lograron establecer su implicación en siete robos, dos estafas y un acto de extorsión, aunque se sospechaba que su actividad delictiva se extendía a otros casos sin resolver en la misma área.

El pasado miércoles, tras un seguimiento exhaustivo, la Policía logró localizar y detener al sospechoso, quien ahora enfrenta serias acusaciones por sus crímenes en la playa de Cala Major, una acción que busca devolver la seguridad a los bañistas y restaurar la confianza en la zona.