El 29 de noviembre, en la isla de Palma, ha tenido lugar un nuevo episodio relacionado con la llegada de migrantes por vía marítima, lo que plantea serios interrogantes sobre la gestión de la inmigración en las costas españolas. En esta ocasión, Salvamento Marítimo y la Guardia Civil han interceptado un total de 52 migrantes que arribaron a bordo de tres pateras distintas en las regiones de Cabrera y Formentera.

La primera de estas embarcaciones fue avistada en la mañana, alrededor de las 09:00 horas, cuando llegó a la playa de Es Migjorn en Formentera, transportando a 15 personas. La intervención fue realizada por agentes de la Guardia Civil, tal como detallaron fuentes de la Delegación de Gobierno en Baleares en un comunicado oficial. Este tipo de situaciones replantea la discusión sobre los recursos destinados a la vigilancia de nuestras costas.

Poco después, alrededor de las 10:00 horas, la Benemérita localizó a un nuevo grupo de 10 migrantes en Sant Francesc de Formentera, quienes habían desembarcado de otra patera. Estos incidentes no son aislados y evidencian una tendencia preocupante en la llegada de migrantes, lo que exige una evaluación exhaustiva de las políticas actuales de control fronterizo.

La última de las embarcaciones fue detectada a las 10:25 horas, a una milla al sur de Cabrera, donde se encontraban a bordo 27 migrantes. La operación de rescate involucró nuevamente a Salvamento Marítimo y a la Guardia Civil, quienes han actuado en el marco de sus funciones de seguridad. Cabe mencionar que todos los migrantes proceden del Magreb y, según los informes, aparentemente gozan de buena salud.

Con estos 52 nuevos migrantes, el número total de personas que han llegado a las costas baleares este viernes asciende a 77. Esta cifra no solo refleja un fenómeno migratorio en crecimiento, sino que también plantea un desafío significativo para las autoridades encargadas de gestionar la llegada de inmigrantes a nuestras islas, lo que sin duda requiere una atención inmediata y medidas más eficaces en el futuro.