En Palma, el 1 de abril, el diputado de Vox en el Parlament, Sergio Rodríguez, ha causado controversia al desear un "feliz día de la victoria", haciendo referencia a la finalización de la guerra civil española en 1939. El presidente de la Cámara autonómica, Gabriel Le Senne, ha considerado este comentario como una simple broma.
Durante la sesión de control al Govern que se llevó a cabo este martes, Rodríguez inició su intervención citando al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, en un tono que parecía provocar al resto de la sala. Dijo: "Permitan que inicie mi intervención, yo que soy muy bien mandado y obedeciendo al Gobierno de España y a su presidente, en su año de celebración, hoy primero de abril les deseo un feliz día de la victoria".
El intercambio de palabras entre Rodríguez y el conseller de Educación y Universidades, Antoni Vera, continuó sin alteraciones evidentes. Sin embargo, al concluir las intervenciones, el portavoz del grupo socialista, Iago Negueruela, solicitó la palabra para criticar el comentario del diputado de Vox, argumentando que glorificar el franquismo va en contra de las normativas parlamentarias vigentes.
Negueruela enfatizó: "Hay leyes aprobadas en el marco del Congreso de los Diputados que prohíben enaltecer determinados símbolos fascistas". Llamó la atención del presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, señalando que Rodríguez debería asegurar el respeto al ordenamiento jurídico de la cámara.
Le Senne, tras escuchar las quejas de Negueruela, le retiró la palabra por primera vez y defendió que el artículo mencionado por el socialista no se aplica a este tipo de afirmaciones. "El artículo 81 habla de las alusiones, y lo que usted ha dicho no tiene nada que ver. Vamos a continuar, guarden silencio", indicó.
En una fase posterior de la sesión plenaria, el presidente del Parlament sugirió que se debió haber invocado el artículo 82 y propuso discutir el asunto en la Junta de Portavoces, que se llevará a cabo el miércoles. Negueruela intentó nuevamente solicitar la palabra, pero su petición no fue aceptada.
El diputado de Més per Menorca, Josep Castells, tuvo la oportunidad de interceder y argumentó que según el reglamento, la presidencia debería haber intervenido para sancionar a Rodríguez por haber realizado comentarios "ofensivos". "El día de la victoria es evidentemente un símbolo del franquismo", afirmó Castells, instando a Le Senne a exigir a Rodríguez que retractara sus palabras y a asegurarse de que no quedaran registradas en el diario de sesiones.
El presidente del Parlament, en respuesta, se defensó diciendo: "Ahora ha citado correctamente el reglamento. Pero yo no he apreciado más que una broma". Tras esta justificación, la sesión de control se reanudó.
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